El cielo...

 Todo parecía formar de una postal de domingo por la tarde,rozando la llegada final del crepuscular.Iban de un tema al otro en la conversación...Estaban sentadas en sus reposeras,así de placenteras,casi desparramadas debajo de la amplia copa de un viejo ombú.
Malena le pidió a su amiga de la infancia,que volviera a contarle aquel episodio de la Nona ,una vez más.Quería volver a revivirlo y pese al tiempo transcurrido ,le seguía pareciendo un hecho puro y genuino.

Tendrían unos nueve o diez años,no más,cuando Giovanna ,con total espontaneidad ,le contó el sueño que había tenido hacía sólo unas hora,apenas en la noche anterior.
¡Había visto a la Nona fallecida,pero viva!
En ese mismo sueño se le había aparecido justamente ella.Estaba como elevada,suspendida el aire,en el medio de la penumbra de su habitación.

Algún poeta diría que fue a visitarla en el dulce adormecer......La visión de de Carmela permanecía intacta,en un rincón del jardín de la memoria,sin marchitarse a medida que iba creciendo cronológicamente.
Carmela,la Nona,que así la llamaban cariñosamente,era una prima lejana de la familia.Había llegado de la región de la Basilicata en el barco Augusto Césare al suelo generoso de Argentina,con su baúl-como tantos inmigrantes-llenos de esperanzas,cambios e ilusiones.Ocurrió,después de finalizada la Segunda Guerra Mundial.

´Más que un barco,la nave que había salido del puerto de Génova,decía que parecía una cáscara de nuez en el medio del océano.Carmela solía usar el luto,una de las típicas costumbres,las mujeres vestidas de luto riguroso y los hombres con la corbata negra.Después pasaban al medio luto,según la tradición.
La Nona padecía de complicaciones pulmonares debido a su asma mal curado y con secuelas desde pequeña.Según los comentarios de mamá no habían llegado por el drama de la guerra a su pueblo aparatología y cantidad de antibióticos adecuados.Muy al pasar Giovana escuchó comentarios de sus crisis respiratorias cada vez más seguidas.

Finalmente y por sus abuelos supo que que en aquellos días Giovana había fallecido,sin que este hecho perturbara o significara nada relevante ni importante para su corta edad.Lo único que Giovana recordaba eran sus visitas con los abuelos ,espaciadas y teñidas del dialécto característico de la región.Su mamá se encargó de enseñarle el verdadero idioma italiano,igualmente siempre reconocía términos del Sur o de la cuna natal .
Con el correr de los años,María Giovana tuvo la certeza y claridad que lo que había visto era una visión real.
Si un pintor hubiera querido retratarla,sería siempre la misma acuarela con los detalles idénticos.No fue un sueño,ni una pesadilla,una alucinación o algo imaginario que se esfuma con el primer sol del amanecer.Menos algo fantasioso o un invento,lejos de aquellos episodios que suelen recrear los niños como finos relatos fruto de su imaginación.

"Sabés lo que me pasó anoche,Malena?, Vi a la Nona que se había muerto, en mi dormitorio"....
Giovana comenzó a describirla una vez más....la Nona estaba igual,su cara permanecía más serena,las líneas de expresión más aligeradas ,suavizados y su rostro más luminoso.El pelo oscuro estaba como siempre,recogido con su clásico rodete.La pollera ancha y su pañoleta de abrigo marrón y tejida en sus hombros.Era la misma persona de siempre,la que había visto en los últimos tiempos,pero más rejuvenecida.Desde mi cabezal la veía elevada,en el aire .

-¿Sentiste miedo Giovi,cuando se te apareció así de la nada?
-Lo viví como algo natural,para nada,en absoluto,.....si me pasa hoy seguro salgo corriendo...
-¿Y qué te dijo?
-Lo único que me dijo,al menos que yo recuerde y tengo muy grabado fue,que
viéndola desde mi cama y ella en lo alto,le pregunté,"Pero Nona ,vos no te habías muerto?.Y me respondió,..."Si,pero arriba se está mejor que allá abajo".